Me suelen decir que no “paro la
pata” ni para respirar, que cómo me da tiempo de hacer todas las cosas que
hago, que de dónde saco la fuerza para llevarlas a cabo…
Bueno, eso tampoco lo sé yo
jajaja
Lo único verídico es que
normalmente las cosas que hago me cargan las pilas a tope!
Porque no sólo me dedico a
sentar el culo a estudiar y a cocinar y reinventar, oiga.
Yo hago deporte casi
a diario, aunque normalmente es salir a caminar bastante rápido y estirar mucho,
además de nadar y series de abdominales de vez en cuando
Es que pensándolo fríamente…
Imagínense que me jincara/comiera/zampara/echara toooodo lo que cocino. Sería
algo así como una gran bola rodadora con sangre de almíbar (aunque más que
almíbar, prefiero sirope de frambuesas *.*) que, aunque parezca bastante
divertido, creo que sería algo un poco desastroso
Bueno, el caso es que esta
semana, y para no variar, no he sentado el culo para nada hasta ahora
De hecho, les escribo tumbada
desde el sofá de mi casa porque estoy muuuy molida de esta mañana. Esto ha sido
básicamente porque un compañero mío me invitó a pasarme por la playa de las
Teresitas en la que estaba teniendo lugar una competición de salvamento
marítimo
Pero, claro: el día estaba
increíble y yo quería estrenar las mallas psicodélicas que me había comprado
ayer
¿Resultado?: casi una hora de
caminata bajo un magnífico sol que casi me convierte en una jarea jajajajaja
Los sucesivos bañitos
posteriores me supieron a maravilla!!
Total, que para recuperar algo
de fuerzas pensé en algo que gustara, que fuera contundente pero bastante sano,
sobre todo si es caserito
Pues eso… ROLLOS DE
CANELA!!!!!!!
Tengo la casa oliendo a estas
maravillas de la naturaleza y gracias a las cuales Alma Obregón comenzó a
seguirme por Twitter :D (de hecho, la receta está sacada de su libro “Objetivo:
tarta perfecta”)
¡Manos a la obra!
Rollos de Canela ó Cinnamon
Rolls
Ingredientes:
Para la
masa
-
650g de harina de fuerza (es una harina indicada para este tipo de masas por
contener un alto nivel de proteínas y que se encuentra ya en cualquier
supermercado)
-
7g de levadura SECA de panadero o deshidratada (no es la típica levadura
“Royal” de toda la vida, sino que se compra tanto en panadería como en algunos
supermercados)
-
250ml de leche entera a temperatura ambiente
-
4 huevos a temperatura ambiente
-
75g de azúcar blanca
-
75g de mantequilla (puede estar de nevera o en pomada, da lo mismo en este caso
;) )
-
½ cucharadita de sal
Para el
relleno
-
40g de harina
-
120g de mantequilla muy fría cortada en cuadraditos pequeños
-
140g de azúcar moreno
-
Mezcla de especias:
·
3 y ½ cucharadas de canela en polvo
·
1 cucharadita de clavo molido
·
½ cucharadita de nuez moscada
·
½ cucharadita de jengibre en polvo
Para el
glaseado
-
2 cucharadas de nata líquida
-
50g de azúcar glass
-
Un chorritín de agua (según queramos más o menos espeso)
Preparación
Lo primero es tener tiempo y
paciencia, puesto que la masa es diferente a otras que hemos hecho y hay que
dejar que fermente bastante tiempo ;)
Primero preparamos la masa
principal: en un cazo al fuego ponemos la leche con el azúcar, la sal y la
mantequilla y sin dejar de remover esperamos a que la mantequilla se derrita,
momento en el que separamos el caldero del fuego y lo dejamos templar
Por otro lado colocamos en un bol la mitad de la harina junto con toda la
levadura seca y comenzamos a batir con los ganchos para masas mientras añadimos
muy poco a poco la mezcla de leche y mantequilla que teníamos templándose
Ahora añadimos los huevos uno por uno
sin incorporar el siguiente hasta que el anterior esté bien integrado
Una vez que tengamos una masa
lisa, añadimos el resto de la harina poco a poco
Cuando veamos que está
integrada, mezclamos a velocidad media alta por unos 5 o 10 minutos
(evidentemente también se puede hacer a mano, aunque es más pringoso y tardarán
un poco más, unos 15-20 minutos)
El truquillo es pillarle el
punto a la masa: debe quedar elástica y lisa, sin que se nos pegue a las manos,
pero sin que sea un masacote incomible. Se trata de amasar y amasar, porque la
primera reacción al ver que está pegajosa la masa es añadir más harina y con
eso lo único que vamos a conseguir es que los rollos salgan secos y duros… Y no
queremos eso, ¿verdad? Ya decía yo jejejej Pues eso, a amasar como locos hasta
que aquello esté perfectísimo y manejable
Ahora tenemos que hacer una
bolita con nuestra masa y ponerla en un bol aceitado o enharinado y taparla con
un pañito de tela. Dejamos reposar esta masa durante una hora y media o dos
horas (hasta que haya doblado su volumen)
Después de fermentar, la
sacamos del bol, la espachurramos sin piedad y la dejamos reposar unos 10
minutos
Pasado este tiempo, extendemos con un rodillo hasta que logremos un
cuadrado de 30 x 30 centímetros
Ahora a por el relleno: ponemos todos los ingredientes dentro de un bol y
con ayuda de las manos vamos desmigajando y restregando la mantequilla con el
resto de los ingredientes hasta que parezca todo una pastita
Bien, pues ahora cogemos la
pasta que hemos hecho y la extendemos por toooooooodo el cuadrado de masa que
hemos hecho (incluso hasta los bordes!!)
Ahora hacemos un churrete con
el cuadrado de masa enrollándolo, para lo cual cogemos el extremo más alejado
de nosotros y lo vamos enrollando hacia nosotros hasta quedarnos una especie de
brazo gitano. Pegamos el borde con un poquito de nata
Tomamos un cuchillo bien afilado (de sierra no, que destrozamos todo!! D:)
y vamos cortando rollitos de unos dos dedos de grosor
NOTA: los extremos no los hornearemos con el resto de rollos, sino que los
guardamos para hornearlos aparte. De hecho, yo los congelé para algún día que
se me antoje :D
Vamos colocando nuestros
maravillosos rollos en una fuente engrasada apta para horno (de cristal,
cerámica, metal…) Más o menos del tamaño que nos convenga para que los rollos
llenen toda la superficie
Ahora tenemos que dejarlos en
un lugar calentito otra vez durante una hora o hasta que haya aumentado casi el
doble de volumen otra vez
Pincelamos con un poco de nata y metemos al horno PRECALENTADO a 190ºC
durante unos 30 minutos + 10 minutos recubiertos con papel de aluminio (esto lo
hacemos para que se sigan cociendo por dentro pero sin quemarse por fuera)
Una vez horneados y aún calentitos nuestros rollos, mezclamos con varillas
manuales todos los ingredientes del glaseado y lo echamos a chorritos encima de
los susodichos
Bueno, lo único que queda
después de esto será contratar a un entrenador personal o algo, porque puedo
asegurar que de lo buenos que están, puedes comerte hasta tres seguidos
Sí. Fui yo. Me comí una vez
tres seguidos. Con su consecuente remordimiento de conciencia
Pero estaban de un bueno que
compensa TODO!!!
¡Ah! Si no se los van a comer
una vez hechos, siempre pueden meterse un par de minutos a 200ºC al horno para
que estén como recién hechos :P
Pues a sacar brazos amasando
como locos!!
Un abrazo muy dulce
Cris G. :)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu comentario aquí :D